Homenaje a Víctor Urquijo
Toda leyenda merece un homenaje y en nuestro querido pueblo tenemos a un futbolista que merece tal condición. Él es Víctor Urquijo Mendiguren, ex jugador del CD Villosa y SD Llodio y que alcanzó la Primera División jugando durante 3 temporadas en el Athletic Club. La extensa trayectoria futbolística de este insigne laudioarra bien merece un sincero reconocimiento. Es por ello que el Club Deportivo Laudio, en colaboración con el Ayuntamiento de Laudio/Llodio, le rendirá un emotivo homenaje. La cita será el próximo 30 de junio a las 18:00 horas en la Sala del Casino del Parque de Lamuza. Desde ya emplazamos a todos los aficionados al fútbol en particular, y al pueblo de Laudio/Llodio en general, a que acudan a este merecido reconocimiento a la figura de Víctor Urquijo.
TRAYECTORIA DE VÍCTOR URQUIJO
Víctor Manuel Urquijo Mendiguren
Fecha de nacimiento: 16/08/1938
Lugar de nacimiento: Laudio/Llodio (Araba-Álava)
Posición: Delantero
Víctor Urquijo comenzó su carrera futbolística a los 18 años con el CD Villosa de Tercera División, en la temporada 1956/57. Un año después ingresó en el Deportivo Alavés, de Segunda División y en 1958 fichó por el CD Basconia, también de Segunda, con el que realizó una magnífica campaña, lo que le valió el fichaje por el Athletic Club. Con el conjunto rojiblanco debutó el 20 de septiembre de 1959 ante el Valladolid (4-3), marcando el cuarto gol de los leones.
Tras dos ejercicios en el club rojiblanco fue cedido a la SD Indautxu, equipo entonces consolidado en la Segunda División, siendo recuperado por el Athletic en plena temporada 1963/64. Después de jugar una campaña en el Recreativo de Huelva (1964/65) y otra de nuevo en la SD Indautxu (1965/66), siempre en Segunda División, Urquijo decidió voluntariamente cerrar su etapa como futbolista profesional y retornó al equipo de su pueblo, el CD Villosa, para liderar una de las mejores etapas de la historia del fútbol llodiano. Impulsado por su talento y su facilidad goleadora, el equipo estuvo muy cerca de jugar dos promociones de ascenso a Segunda División. En la temporada 1967/68, Víctor Urquijo obtuvo el título individual de máximo realizador de su grupo de Tercera División, al anotar 24 goles en 30 jornadas de Liga. Llegó a tiempo para conocer el cambio de denominación de CD Villosa a SD Llodio en 1972, y ya en 1974 se retiró de la práctica deportiva tras casi dos décadas como futbolista.
Jugador de clase extraordinaria, con visión, capaz de crear y ejecutar jugadas, en sus tardes inspiradas emergía muy por encima de sus compañeros y rivales. Quizás, solo le faltó algo de carácter, o como se suele decir, de “creérselo”, para haber adquirido el rango de figura nacional. Respecto a su periplo en el Athletic, Urquijo jugó un total de 13 partidos de Liga y 1 de Copa del Rey en los que anotó 4 goles, lo que hace un respetable promedio de casi un tanto cada tres partidos. Hay que recordar que en aquella época se disputaban muchos menos partidos y que la Primera División solo tenía 16 equipos.
Una de sus dianas más celebradas en el Athletic fue la que consiguió ante el Real Madrid el 12 de enero de 1964. Antes del partido se sabía que el jugador que marcase el primer tanto del Athletic se llevaría el trofeo instituido por el diario El Correo para el autor del gol número 2000 del equipo en la Liga, y ese honor recayó en Víctor Urquijo. A los 39 minutos anotó el gol que igualó el marcador tras el tanto inicial madridista obra de Alfredo Di Stefano. Finalmente terminaría venciendo el Real Madrid por 2-3. Un recuento hecho tiempo después acabó concluyendo que el gol 2000 lo había obtenido Latorre unas fechas antes, el 29 de diciembre de 1963 ante el Valladolid, pero el reto lanzado en su día fue patrimonio de Víctor Urquijo.
Durante su extensa trayectoria futbolística coincidió con auténticas figuras como por ejemplo Carmelo, Iribar, Garay, Orue, Etxeberria, Mauri, Maguregui, Koldo Aguirre, Artetxe, Arieta I, Iñaki Sáez, Uriarte todos ellos internacionales con el Athletic. En el Recreativo de Huelva compartió vestuario con un mito como Enrique Mateos, que había ganado anteriormente 5 Copas de Europa y 1 Intercontinental con el Real Madrid y en la SD Indautxu lo hizo con un joven José Eulogio Garate, posteriormente leyenda en el Atlético de Madrid, con el que sumó 3 Pichichis, 3 Ligas y 1 Intercontinental.
